Cuentan que en tiempos de la antigüedad había un sabio que con su sabiduría irritaba al rey del lugar. Entonces el rey fue a conocerlo.
Cuando lo vio, lo primero que le preguntó fue:
Cuando lo vio, lo primero que le preguntó fue:
-"¿Cuántos años tienes?" (por aquello de que la sabiduría tiene que ver con la edad).
A lo que el sabio respondió:
A lo que el sabio respondió:
- "No sé".
Esto puso al rey fuera de sí porque interpretó que el sabio estaba riéndose de él. Entonces gritó: -"¡Cómo que no sabes cuantos años tienes! ¿Te estás burlando de mí?".
A lo que el sabio respondió serenamente:
Esto puso al rey fuera de sí porque interpretó que el sabio estaba riéndose de él. Entonces gritó: -"¡Cómo que no sabes cuantos años tienes! ¿Te estás burlando de mí?".
A lo que el sabio respondió serenamente:
-"No, señor. Los años que tengo son para mí los que me falta vivir y no los que he vivido, los que he vivido ya no los tengo, por lo tanto, no sé cuantos años tengo."
Pues viendolo desde el punto de vista del sabio, tiene mucha razón. El sabio piensa con lógica y saca conclusiones no importa lo pasado si no lo que está por llegar.
ResponderEliminarBesitoss guapaa