No te rindas, aún estás a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada día es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estás sola,
porque yo te quiero.
Mario Benedetti
14/09/1930 ✤ 17/05/2009
excelente
ResponderEliminarSoy Matilde Ramirez.Escribí el comentario antes de hallar este recuadro.Como expresé en él,descubrir este rincón fue como arrebujarme en un nido tibio,justo ahoraque me siento como una criaturita pequeñita(y soy grande de talla y edad)y desvalida(y no lo soy)Gracias por existir,nido calentito del ciber espacio!! Matilde
ResponderEliminarMatilde tus palabras me llegan al corazón, cuanto me alegro que los cuentos que elijo sea tu refugio donde anclar, en algún momento me sentí igual que vos, nadie es lo suficientemente grande para hacerte sentir inferior...
ResponderEliminarNo te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada día es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estás sola,
porque siempre habrá alguien que aunque no te des cuenta te quiera
Gracias por tu amable comentario Graciela